domingo, 20 de diciembre de 2009

SONETO TU OLVIDO




La sombra de tu abismo me persigue
por las noches grises del desconcierto
Solo intento esconderme de lo incierto,
de tu esencia reina que no consigue

teñir de oscuro este vuelo inseguro
que solo intenta desplegar sus alas.
No logrará aunque empeñe con ganas
la astucia que subleva lo seguro.

Quitaras esos, tus labios impíos
como acechantes besos de sirenas
que entorpecen y tientan mi navío

Borraré las huellas que surcan mi piel
y como un vendaval que escapa hacia el mar
hallaré olas que emancipen tu miel.

lunes, 7 de diciembre de 2009

TRANQUILÍZATE CARIÑO…




Dibujaste con tu dedo mi sonrisa, y luego sonreíste dando vida a tu dibujo.
No quedo un enojo, no quedo siquiera un mal recuerdo; con esa facilidad para el encanto, con esos ojos enternecidos, que son tus armas mas preciadas, descontando el sexo, que dibujas con tu cuerpo, y que luego cobra vida, en un suspiro que se pierde en lo profundo de un gemido. Y tú haces arte. Con cada fragmento de tu ser, desenfundas los anhelos, las nostalgias que por el aire escapan de la vista, no de tus ojos, que adormecidos me seducen, y yo me rindo, porque así gano, porque así solo se que gano, y tu me tienes y yo te tengo; pero tú haces arte. Con tu vientre fundas un lecho a mis antojos, y me adormeces como a un niño agotado, agotado de tus senos que son el fruto de alimento. Y tú haces arte. Con tus labios besas el silencio de mis suspiros mientras duermo, y yo los siento mientras sueño, son tus besos el camino a un abismo, y yo camino. Pero tú haces arte. Ese abismo en el que caigo es tu silencio, que late como mi corazón en tu pecho.
Y tu piel es la manta que me envuelve, la sinuosa manta que cubre mi cuerpo perplejo centímetro a centímetro en un abrazo. Y tú haces arte. Y no hay lamentos. No dejas un enojo, siquiera un mal recuerdo.

viernes, 4 de diciembre de 2009

MISTERIOSA...


“Y las miradas que robaste con tu escote, donde las habrás guardado?”

Misteriosa que caminas por la lluvia, con tus pasos casi lentos.
Misteriosa que caminas por lamentos, con tu mirada gacha y tus tormentos
Hacia donde tu rumbo encarna, hacia donde gastaras tu tiempo…
Misteriosa que la lluvia besa, susurrándole solo al viento
Por qué senderos has de andar, por qué hay refugio en tu encuentro
O a caso te estarás fugando, como yo, de algún cuento…